Posterior a que el presidente de Colombia, Iván Duque firmara la nueva regulación en el decreto 811 que ahora permite el acceso seguro e informado al uso médico y científico del cannabis, se dio también luz verde a la fabricación de textiles, alimentos o bebidas a base de cannabis, además de hacer posible la exportación de la flor seca de cannabis.
Con la eliminación de la prohibición que limitaba la exportación total de la flor seca, el país entra a jugar en grande al mercado internacional y es una oportunidad de oro para las empresas que operan en Colombia.
Las flores de cannabis concentran todos los compuestos medicinales y psicoactivos de la planta, por lo que tiene un impacto en el mercado que supera el 50% de las ventas de cannabis a nivel mundial.
Pese a que persistía el temor por parte de las autoridades al tráfico ilegal de la planta, con las exportaciones se abre la posibilidad de explorar nuevos mercados y a aprovechar los costos de producción de la planta en el país donde está el boom de la industria.
Se estima que para el 2024 con las nuevas normas establecidas, el negocio del cannabis medicinal pueda llegar a ser una industria que genere alrededor de 64 millones de dólares.